Blog
Blog>
Previsiones para producción porcina para 2030
21 de junio de 22 - Noticias
¿Cómo produciremos en 2030? Esta es la pregunta bajo la cual se desarrollaron las XXIV Jornadas de Porcino de la UAB y la AVPC, celebradas en la Facultad de Veterinaria de la UAB con la asistencia de distintos profesionales del sector que abordaron temas como sostenibilidad, tecnificación, reducción de antibióticos, genética e instalaciones.
Desarrollo sostenible
La Agenda 2030 es una de las principales cuestiones al hablar de desarrollo sostenible. Así lo expuso Margaux Costas, que incidió en la necesidad de contar con una guía de referencia para mejorar la gestión en la producción teniendo en cuenta temas tan importantes como la sostenibilidad y el bienestar animal, el medio ambiente, y las personas. En este sentido, Costas destacó que se debe disponer de parámetros que se puedan medir para así saber que se debe mejorar. De este modo, los ganaderos podrán tener a su alcance a un amplio abanico de oportunidades de mejora que deben ser aprovechadas para alcanzar una producción más sostenible.
Tecnificación y digitalización
Como explicó Carlos Piñeiro, disponer de datos que puedan generar conocimiento es algo indispensable para alcanzar objetivos vinculados a eficiencia, sostenibilidad y medio ambiente. En este sentido, se hace necesario que las empresas dispongan de un sistema de información capaz de apoyar su proceso de toma de decisiones. Este sistema no debe estar formado únicamente por un software, sino que debe contar con un protocolo de trabajo y unos procedimientos capaces de generar la información necesaria para una correcta toma de decisiones. Dicho sistema debe contar con cinco pasos: recogida de datos, procesamiento de datos, elaboración de informes, distribución de la información, análisis y toma de decisiones. Como concluyó Piñeiro, su correcto desarrollo supone una oportunidad para el sector como nunca.
Reducción de antibióticos
La urgencia por reducir el uso de antibióticos hace necesario una serie de cambios en el modelo de cría de cerdos. La propuesta que Cesc Illas expuso incluye acciones como el tratamiento curativo individual de los animales, dejando atrás el tratar por grupos. Para ello, Illas consideró necesario la involucración tanto de los veterinarios como de la dirección de las empresas, así como un especial cuidado a las personas encargadas de la cría de los animales, estableciendo comunicaciones fluidas con ellos, pues serán sus hábitos los que definan el resultado final. Por otro lado, Illas apuntó que es necesario rediseñar las estructuras y flujos, dar un paso más en el manejo de bandas (bandas de cinco semanas porque permite hacer un vaciado sanitario “de todo el lote) y no dejarlo solamente como una herramienta de organización en granjas pequeñas.
Genética
Pese al gran impacto que ha causado el desarrollo de las líneas genéticas en porcino, Joan Estany apuntó que lo más probable es que a corto plazo no haya ningún cambio estructural relevante y, por tanto, que en un futuro próximo los cerdos sean como los actuales más el cambio genético que estos programas hayan generado de nuevo. En este sentido, Estany explicó que el progreso genético por selección es casi imperceptible de un año para otro y no llega al productor hasta después de unos años. Por ello, se prevé que en 2030 los cerdos comerciales sean en buena medida como los que ahora se seleccionan.
Instalaciones
Las instalaciones para cerdas en maternidad son otro de los aspectos para tener en cuenta para mejorar la eficiencia productiva hacia 2030. Como destacó Déborah Temple, el sector ya avanza hacia nuevos sistemas de alojamiento de la cerda y sus lechones en maternidad. Paralelamente, han surgido iniciativas legislativas como “End of the Cage Age”, que persigue la prohibición de las jaulas, y que pretenden mejorar el bienestar de la cerda.
Tras el análisis de varios sistemas de maternidades libres en confinamiento temporal, Temple destacó tres aspectos clave: que los sistemas de maternidad tengan un espacio de calidad que permita a la cerda separar las zonas funcionales; dar importancia al nido para evitar aplastamientos y poder manejar sin riesgos a los lechones; y trabajar con personal capacitado y calificado.