M. Señorón: “Las placas de Rotecna nos permiten un consumo eficiente”

Tras finalizar sus estudios en la Escuela de Ingenierías Agrarias de Badajoz, Mariano Señorón se puso al frente de la granja Los Baldíos, en el municipio pacense de Alburquerque, siguiendo de este modo la tradición familiar. Construida en el año 2002 por su padre, la granja cuenta actualmente con 2.500 plazas de madres ibéricas y 7.000 plazas de destete. En su apuesta por el bienestar animal, Mariano lleva años confiando en las soluciones que ofrece Rotecna, como las placas calefactadas hidráulicas o las tolvas Swing R3 Duo, que tiene instaladas en las salas de destete de la granja.

Mariano Señorón en la nave de destete. Foto: Rotecna.

¿Por qué decidió dedicarse a la cría de cerdos?
Me viene desde pequeño, es de familia. Mi padre se ha dedicado toda la vida al sector porcino y es algo que me inculcó. Con el tiempo, yo me he ido formando, hice la carrera de ingeniero agrónomo y también he estudiado un máster en porcino, y he decidido seguir con el negocio familiar.

¿Cuál es el origen de esta granja?
Esta granja se remonta al año 2002, cuando mi padre empezó su construcción. Con el tiempo ha ido evolucionando, ya que en un principio comenzamos con Duroc y luego cambiamos a la raza ibérica. Con estos cambios también hemos ido incrementando el censo de la granja, y hemos pasado de tener 500 madres ibéricas a 2.500, además de 7.000 plazas de lechones destetados.

¿Cómo está distribuida?
La granja cuenta con una cuarentena con 600 plazas de primerizas, dos zonas de inseminación con 630 jaulas, una nave para la recela de las cerdas multíparas y primerizas, y dos naves dedicadas a la maternidad, con 540 plazas en total. Por último, tenemos la zona de gestación confirmada, con una capacidad total de 1.500 plazas, y la zona de destete, con 7.000 plazas.

¿Cuántas personas trabajan en estas instalaciones?
Contamos con un total de 10 empleados que están repartidos por zonas. Es decir, tenemos personal que se dedica exclusivamente a la zona de gestación y se encarga de todo el proceso de inseminación, recela, limpieza y todo lo relativo al control de ese período hasta la llegada al parto; personal exclusivo en la zona de maternidad, que se dedica a la atención de partos y al día a día (alimentación, control de las camadas, etc.); una persona que se dedica al destete, y, por último, dos personas que se encargan del mantenimiento de la granja y de que esté todo a punto en el día a día.

Destete ibérico con placas calefactadas hidráulicas. Foto: Rotecna.

En el destete tienen instaladas las placas calefactadas hidráulicas de Rotecna. ¿Por qué eligieron este producto?
Debido a la situación actual y a cómo se presenta el futuro, decidimos sustituir la calefacción eléctrica por el sistema de calefacción hidráulica con caldera de biomasa. Concretamente, nos decidimos por las placas de Rotecna por su experiencia en el sector porcino y la calidad de sus materiales.

¿Qué beneficios destacaría del uso de las placas?
Destaco, sobre todo, el ambiente, la sensación térmica que hay dentro de la sala donde están los lechones. Las placas ofrecen un ambiente térmico agradable, con una temperatura adecuada. También hay que recalcar que el funcionamiento de la instalación es muy sencillo.

¿Qué manejo hacen con las placas? ¿Cómo las regulan?
Tenemos unos controladores automáticos. En función de la edad de los lechones, ese controlador va reduciendo la temperatura de las placas automáticamente hasta que llega un punto, en la cuarta semana, en el que cerramos directamente la calefacción porque consideramos que ya no es necesaria. De esa manera evitamos un consumo excesivo y generar calor cuando ya no es necesario. Empezamos con una temperatura de 37 grados, y los reguladores se ajustan con una sonda que se pone en contacto con la placa. Luego medimos la temperatura con un láser en la superficie de la placa y jugamos un poco con ese margen que hay entre lo que medimos nosotros y lo que nos marca la sonda para establecer la temperatura confortable para el lechón.

¿Son placas eficientes desde un punto de vista energético?
Al final, todo depende de la instalación, pero sí, las placas hidráulicas de Rotecna nos permiten tener un consumo muy eficiente. La regulación te permite no tener que estar constantemente pendiente de la temperatura de la placa, y regula automáticamente la temperatura de la misma en función de la edad del lechón, y eso te proporciona muchas ventajas y comodidad.

Nave de destete equipada con productos Rotecna. Foto: Rotecna.

También tienen la Swing R3 Duo. ¿Por qué escogieron este modelo de tolva para el destete?
Principalmente por su facilidad de manejo, la fácil adaptación de los lechones y el escaso desperdicio de pienso que hay. Es una tolva que se regula muy fácilmente y que permite, con poco esfuerzo para el lechón, tener siempre el pienso disponible. Es muy simple de utilizar, ya que únicamente accionando la palanca te permite una buena caída del pienso, y se regula muy fácilmente. Por otro lado, con la Swing R3 Duo los lechones pueden acceder de forma muy fácil a la comida, sin tener que hacer un esfuerzo excesivo para hacer caer el pienso. Al final, lo que buscamos es que el lechón, a la hora de ir al punto de comida y de agua, lo tenga lo más fácil posible. Además, se trata de una tolva a la que los lechones se adaptan fácilmente. Durante los primeros días de su llegada al destete sí que requieren algo más de atención, ya que, por fácil que sea el mecanismo de bola de caída del pienso, deben aprender su funcionamiento. Según van pasando los días, el desperdicio de pienso con esta tolva es inexistente.

¿Qué otros productos Rotecna tienen instalados?
En el destete tenemos las viguetas, el Basic Post Beam (pilar de apoyo para viguetas), los slats, los separadores de Rotecna y los platos, y en maternidades tenemos dosificadores. Además, contamos con el separador sólido-líquido de Tecnapur para la gestión de los purines.

En general, ¿qué valora más de Rotecna?
La confianza que ofrece y la calidad de sus productos. Es una empresa más que asentada y más que conocida en todo el mundo, y apostamos por ella porque nos transmite seguridad y confianza. Cuando hacemos una instalación nueva, lo que buscamos es que sea confortable y, sobre todo, que sea duradera, y esos dos factores nos los ofrece Rotecna.

Imagen exterior de la granja. Foto: Rotecna.

A nivel sanitario, ¿cuáles son sus principales preocupaciones?
La principal preocupación es el control estricto de la bioseguridad, tanto interna como externa, para evitar la entrada de enfermedades a la granja.

¿Qué medidas de bioseguridad adoptan en la granja?
Tenemos un vallado exterior, algo fundamental y básico. Para el acceso a la granja es obligatoria la ducha, el uso de ropa específica por zonas de trabajo y el uso de calzado de granja. Por otra parte, en lo que refiere a los animales, es obligatorio el cumplimiento de medidas higiénicas diarias como el cambio de agujas, la limpieza de salas, etc.

Para terminar, ¿qué retos de futuro plantean para esta granja?
Somos muy exigentes y nuestro principal reto es mejorar la producción. En este sentido, tenemos en marcha un proyecto que quiere garantizar que nuestros animales estén en las mejores condiciones posibles en cuanto a bienestar animal se refiere. El proyecto se basa en la recogida de datos mediante sensores ambientales, que miden parámetros como la temperatura, humedad, CO2, etcétera, y que están instalados en diferentes ubicaciones de la granja. Los sensores envían los datos recogidos cada 15 minutos a una plataforma blockchain. De esta forma, podemos garantizar que los cerdos tengan unas condiciones ambientales óptimas. Con este proyecto queremos sentar las bases para poder incorporar las últimas tecnologías que garanticen el bienestar animal en todas las partes del proceso de cría del cerdo ibérico, abriendo un abanico de oportunidades dentro del sector porcino, tanto a nivel regional como nacional. Hay que mencionar que la granja cuenta con hilo musical en todas sus instalaciones, con lo que conseguimos generar una mayor tranquilidad en los animales.